¿Por qué discuten las parejas en las vacaciones ?
A lo largo del año, la pareja puede llegar a tener discrepancias, que no son tenidas en cuenta, dado que existe una rutina laboral, social, familiar y mismo sentimental que los obliga a seguir adelante sin plantearse los conflictos. Al llegar las vacaciones, la pareja está más distendida y supuestamente, dispuesta a relajarse, pero justamente eso es lo que puede sacar a flote los problemas que la pareja arrastra a lo largo del año.
¿Por qué peleamos ?
La pareja se ve rodeada de un contexto que no es el habitual, y debe comenzar a replantearse hechos cotidianos como el horario de despertarse, el lugar elegido para salir, las comidas, el horario para ir a la playa, etc. No se adapta a la nueva rutina o la falta de ella, y en consecuencia, se generan las discusiones por cualquier tema.
Las causas más comunes de peleas durante las vacaciones son :
Celos : En el verano, por lo general, las mujeres muestran más su cuerpo, y mucho más si están de vacaciones. Sumado a que la pareja está en un ámbito no cotidiano y propenso a conocer gente nueva, los hombres son los primeros en reaccionar con escenas de celos y en generar una pelea por estos motivos. También es común que las mujeres sientan celos cuando ven a su pareja observando a otras mujeres en la playa.
Organización del viaje : Es frecuente que al tener expectativas diferentes, la pareja no se ponga de acuerdo en los temas principales del viaje : las fechas de salida, el tipo de destino que prefieren (playa, montaña, ciudad), la duración del viaje, y hasta el tipo de alojamiento.
Itinerario : Supone un riesgo de pelea al decidir qué visitar, dónde hacer las compras o dónde salir de noche.
La economía : Este es uno de los principales motivos de pelea. Cuánto gastar y en qué es el quid de la cuestión.
Los acompañantes : ¿Invitamos a tus padres ?, ¿Vamos con los amigos ? La decisión de viajar solos o acompañados y con quién puede derivar en un conflicto cuando ambas partes no están dispuestas a negociar.
Los hijos : En vacaciones, los niños pasan todo el día en casa y necesitan distracciones. Con ello los padres pueden sentirse agobiados y descargar su malestar contra su pareja. Otra realidad, es que en las vacaciones, los padres tratan de recuperar el tiempo perdido con sus hijos, y se apegan a ellos, descuidando la vida de pareja.